Los divertículos intestinales son pequeñas bolsas o saquitos abultados que salen desde la luz del intestino hacia el exterior de este.
El lugar donde se encuentran con mayor frecuencia es en una zona del colon izquierdo llamada Sigma.
Cuando hablamos de diverticulosis es cuándo se encuentra la existencia de estos divertículos en el colon.
A pesar de que rara vez causan problemas si alguno de estos divertículos se inflaman ya se estaría hablando de diverticulitis.
Más del 80% de las personas con diverticulosis pueden ser asintomáticas. Cuándo se vuelve diverticulitis se suele presentar dolor agudo y constante sobre todo en la fosa ilíaca izquierda.
La mayor parte de los divertículos del colon se producen por un aumento en la presión interna del mismo.
Provocando, con el paso del tiempo que su mucosa y submucosa qué son sus capas internas se hernien y caigan los órganos (prolapso) a través de los puntos de la pared que se encuentran con más debilidad y menor resistencia.
La diverticulitis puede comenzar cuando las bacterias o algunas heces llegan a quedar atrapadas en una bolsa del colon disminuyendo la flora saludable y con ello aumentando las enfermedades.
La aparición de estos divertículos y de su inflamación llevándolos a diverticulitis es más frecuente cuándo se consume fibra en poca cantidad en los alimentos.
La presión interior en el colon resulta más grande y puede ser en uno o más de estos pequeños sacos.
Existe mayor frecuencia de este padecimiento después de los 40 años.
Aparece, aproximadamente, a la mitad de las personas mayores de 60 años y requiere diagnóstico médico que con frecuencia va acompañado de un análisis de laboratorio o de estudios de diagnóstico por imagen.
Síntomas, Diagnóstico y Tratamiento
Los síntomas de la diverticulitis son:
- dolor abdominal
- fiebre
- náuseas
- cambio en los hábitos intestinales que pueden ser diarrea
- estreñimiento
- flatulencias
- indigestión
- meteorismo (exceso de gas en el intestino)
- náuseas
- sangre en las heces o vómitos
Además se presenta escalofrío y fiebre o en ocasiones pérdida del apetito y son comunes los calambres.
Generalmente la diverticulitis se diagnostica usando una tomografía computarizada de abdomen y pelvis, o una exploración con un contraste intravenoso.
La diverticulitis además de inflamación se considera ya una infección, pero qué, tratada por un médico profesional puede curarse en cuestión de semanas o incluso de días.
Para su tratamiento, que siempre debe ser de la mano de un profesional, se lleva a cabo un cambio de dieta, basándose en una dieta líquida, alta en fibra y suplementos alimenticios.
Se recetan antibióticos cómo la penicilina apoyándose en ocasiones con líquidos intravenosos y se incluye el reposo.
En los casos más graves se puede requerir hospitalización e incluso cirugía.
Después de la recuperación y para evitar episodios futuros de diverticulosis los médicos normalmente recomiendan una dieta alta en fibras.
Recomendaciones
Para evitar la diverticulitis es bueno seguir una dieta baja en carbohidratos, oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables, ya que teniendo una dieta baja en ellos se puede prevenir la presión alta en el colon.
Lo mismo hay quién recomienda evitar ciertas frutas como las manzanas, peras y ciruelas así como alimentos lácteos o fermentados, frijoles, repollo, coles de bruselas, cebollas, ajos, carnes rojas, la carne procesada, alcohol y frituras.
Por el contrario, se recomienda una dieta rica en frutas, verduras y granos integrales.
Otra de las recomendaciones para disminuir el riesgo de desarrollar diverticulitis es hacer ejercicio y tomar agua suficiente.
Gran parte de nuestra salud y ánimo radica en el correcto funcionamiento de nuestro intestino por lo que en Colón Center te invitamos a tener una vida sana y a darle una mejor calidad a tu Colón, acércate a nosotros y con gusto te ayudaremos.